Sinopsis:
Morir es un asco-- y Ember McWilliams lo sabe de
primera mano. Tras un fatal accidente de coche, su talentosa hermana pequeña la
trae de vuelta. Ahora todo lo que Ember toca muere. Y eso, bueno, apesta.
Ember sigue una política de 'no tocar' nada que esté vivo--incluyendo chicos. Cuando Hayden Cromwell aparece, citando a Oscar Wilde y proclamando que su maldición es un don, ella cree que es un loco muy guapo. Pero cuando le explica que la puede ayudar a controlarlo, ella está más que interesada. Solo hay un problema: Ember tiene que confiar en el padre adoptivo de Hayden, un hombre del cual ella está segura tiene siniestras razones para coleccionar niños cuyas habilidades le parecen incluso más raras.
Ember sigue una política de 'no tocar' nada que esté vivo--incluyendo chicos. Cuando Hayden Cromwell aparece, citando a Oscar Wilde y proclamando que su maldición es un don, ella cree que es un loco muy guapo. Pero cuando le explica que la puede ayudar a controlarlo, ella está más que interesada. Solo hay un problema: Ember tiene que confiar en el padre adoptivo de Hayden, un hombre del cual ella está segura tiene siniestras razones para coleccionar niños cuyas habilidades le parecen incluso más raras.
Sin embargo, ella está dispuesta a hacer cualquier
cosa para coger de la mano a su hermana otra vez. Y qué demonios, a ella
también le gustaría ser capaz de besar a Hayden. ¿Quién no querría? Pero cuando
Ember aprende que el accidente que la transformó en un monstruo puede no haber
sido un accidente, ella no está segura de en quién confiar. Alguien la quiere
muerte, y cuanto más se acerca a la verdad, más cerca está de perder no solo su
corazón, sino su vida. Esta vez de verdad.
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